La reunión de Oasis, una de las bandas más influyentes del rock británico, no solo está marcando la agenda musical de 2025, sino que se ha convertido en un acontecimiento cultural de escala global. La gira Oasis Live ‘25 ha dejado una estela de titulares en medios internacionales y nacionales, coincidiendo en un punto: la música de los Gallagher volvió a emocionar como si el tiempo no hubiera pasado.

“El evento más reconfortante del año”, resumió Rolling Stone al describir la experiencia de volver a escuchar himnos como Wonderwall o Live Forever en estadios repletos. Para The Hollywood Reporter, la velada tuvo un componente generacional innegable: “Hubo fans de todas las generaciones, pero la noche perteneció a los nacidos en este siglo, muchos de los cuales lloraron canción tras canción”.

En México, Reforma destacó la magnitud del fenómeno al reunir a “65,000 fans en una catarsis colectiva”, mientras que El Universal calificó cada parada de la gira como “más que un concierto, un evento cultural”.

La crítica internacional coincidió en que Oasis no solo regresó, sino que lo hizo con mayor fuerza. The Wall Street Journal afirmó que “la banda está mejor que nunca”, mientras que el San Francisco Chronicle lo describió como “un momento histórico”. Incluso medios de moda como Vogue subrayaron que, pese a su separación en 2009, “la historia y el encanto de la banda se han mantenido firmes e irresistibles para los veinteañeros”.

Los conciertos se han convertido en espacios de comunión. Los Angeles Times habló de “experiencias comunitarias terapéuticas que inspiran lágrimas de alegría”, mientras que The Washington Post fue más poético: “Cantar ‘Wonderwall’ a todo pulmón en un estadio lleno es atar cabos cósmicos sueltos”.

El impacto se extiende incluso fuera de los recintos. Variety narró cómo en Nueva York “el viaje en tren de regreso se convirtió en un segundo bis, con los fans entonando a capella ‘Don’t Look Back in Anger’ y ‘Live Forever’”.

Con cada ciudad conquistada, Oasis confirma que su música trasciende generaciones. “Fue y es la voz de una generación”, escribió Excélsior. Y como concluyó Chicago Sun-Times: “Esta es una nueva era de Oasis. Que vivan para siempre”.